La Resurrección de los Muertos y el Arrebato:
Los cristianos creemos, y en eso todos están de acuerdo, que habrá una resurrección de los muertos el último día, o sea el día del Juicio. Y algunas denominaciones protestantes le adhieren a tal creencia la idea del "arrebato" o del "rapto", que entienden que Dios se llevará a los justos al Cielo a vivir en la Nueva Jerusalén.
Yo entiendo a ambas como coherentes, tanto la resurrección como el arrebatamiento.
Recuerden que creo en la reencarnación, y además en la Resurrección, por lo que todas las personas presentes, pasadas y futuras estarán presenciando ese día. Pero ese día de la resurrección de los muertos que viene de la mano del arrebatamiento, será posterior al de la Segunda Venida, aunque aclaro, que en la Segunda Venida de Cristo también habrá una resurrección pero del espíritu, ya que hablamos del establecimiento del Reino del Mesías en la Tierra, que ese tema lo ampliaré luego. Pero haciendo referencia al último día, o sea el del Juicio, de la Resurrección y el Arrebatamiento, creo que el hombre resucitará en cuerpo y alma como Jesucristo, para ser tomado y ascender al Cielo donde Cristo ya subió antes y ha preparado nuestro Lugar y el Camino.
El Hombre recibirá un cuerpo glorioso y renovado, resucitado en el espíritu, recibido de las Gracias de las victorias de Nuestro Señor.
¿Ahora por qué el Arrebatamiento? Yo creo en el arrebatamiento porque Jesús además de Resucitar en un Cuerpo Glorioso y Santo, ascendió a los Cielos, y el camino que él ha trazado es el mismo que nosotros recorreremos. Por lo que seguiremos a nuestro guía que es Dios, que vino al Mundo a pagar nuestras deudas y a salvarnos recorriendo un camino y trazándolo para nosotros, que es cumplir el Evangelio, Resucitar y Ascender a los Cielos. El mismo camino debemos recorrer para ser salvos, y eso se concluirá el último día, del Juicio Final, que lo creo posterior a la Segunda Venida de Cristo, que luego aclararé por qué.
En la Segunda Venida Cristo viene a establecer su Reino en la Tierra, pero el mundo seguirá su curso y la vida de las personas, vendrán luego otros reinos e incluso otra apostasía, la final, y luego en el Final de los Tiempos que siempre llegan, se manifestará Cristo Resucitado, el Mundo será destruido, y los elegidos que han muerto resucitarán en un cuerpo nuevo y santo a semejanza del de Cristo Resucitado, y ascenderán al Cielo junto con su Rey para volver de donde pertenecemos al Paraíso prometido. Y los condenados se quedarán en la soledad y angustia absoluta, habitando en el mundo material inerte, sin expresión alguna y sin pedido posible de ayuda, ya que han rechazado a Dios en todas las oportunidades y posibilidades.
Por último, quiero aclarar el conflicto: Creo en la reencarnación, el hombre nace y muere, y se reencarna, y también creo en la resurrección, porque en el último día resucita en un cuerpo santo a semejanza al de Cristo resucitado, y también en el arrebatamiento que es la ascensión a los Cielos. Así queda sellado mi dogma, que no niego el del Credo católico, y a la vez creo en lo que los católicos y la mayoría de los cristianos no creen, y que he podido conciliar a las creencias tradicionales, hablo de la "reencarnación en el cristianismo".
miércoles, 6 de febrero de 2013
lunes, 4 de febrero de 2013
Lo que se espera...
¿Destino o Azar?
Las personas creyentes o no siempre nos preguntamos si todo lo que nos acontece es por pura casualidad o porque está escrito que sea así...
En el foro donde participo este tema se ha discutido hasta el hartazgo, y hay muchos argumentos en pro y en contra.
Se dice que es un poco injusto que las cosas estén previstas, porque es como que nuestra libertad está anulada, y entre otras cuestiones esta idea deja mal parado a Dios si tenemos en cuenta todas las cosas malas que pasan.
Mi argumento es que los cristianos creemos que el bien está resguardado por Dios, y que todo lo que sucede malo o bueno es conveniente, que al final todo tiene un plan benigno previsto por Dios con un final feliz.
Se dice que nuestra libertad estaría anulada, pero no es así. Es difícil conciliar la idea del destino con la libertad en pocas palabras, pero puede comprenderse. La libertad no está anulada, pero existen los límites, no todo lo que queremos se puede conseguir, Dios es nuestro guía y árbitro. Que Él decida nuestros destinos no es malo, porque si es nuestro rector pero a cambio somos felices ¿Qué importa pues? En cambio si somos libres e independientes y prescindimos de Dios pero a cambio debemos sufrir por conseguir todo lo que necesitamos, no es un buen negocio.
No somos títeres de Dios, tenemos voluntad y también libertad, pero Dios también tiene libertad y voluntad, por ello se conjugan ambas voluntades la de Dios y la del hombre. Es una relación la que vive el hombre con Dios.
Pero Dios es nuestro Señor, esa es la diferencia, nosotros somos servidores de él, aunque en definitiva Dios termina siendo servidor del hombre.
Dios tiene un plan para cada uno, la línea está trazada ¿Y eso anula nuestra libertad? Claro que no, pero como dije anteriormente, existen límites, no todo lo que anhelamos lo podemos conseguir.
Todo lo que sucede está previsto, las personas que se cruzan en nuestras vidas no son por puro azar, conocer a la mujer de mi vida y casarme con ella no es suerte como tampoco mero mérito por la conquista. Y las personas que perdemos no es algo que se podría haber evitado del todo, sino que a veces está previsto que sea así.
Es mejor creer que las cosas suceden porque así está previsto antes que el puro azar, porque eso es creer en Dios, que él tiene un plan para cada uno, y que anhela lo mejor para nosotros, así seamos solteros, pobres, o ricos o casados, con hijos, etc. Todo lo que sucede es conveniente.
La libertad absoluta no existe, como tampoco somos títeres. Existe la felicidad si obedecemos a Dios, y la infelicidad si le rechazamos.
El mundo está guiado, y la creación está guiada. Dios acompaña al hombre y lo guía.
Incluso hasta las cosas malas están previstas y permitidas, por alguna razón. Es la pregunta del millón ¿Si Dios es justo y bueno por qué hay guerras y hambre en el mundo? ¿Si Dios decide los destinos por qué todo ello, acaso es un mal Dios?
Lo cierto es que quisiéramos explicar todo como para justificar a Dios, pero lo que creemos es que todo sucede por algo y que tiene final feliz, así lo creemos, que es conveniente por alguna razón. Y lo cierto es que esto nos da más ánimos que pensar que no hay Dios y que todo se maneja con el azar, que todo lo ganamos o lo perdemos dependiendo de nosotros, así vivimos los fracasos con mucha culpa y las victorias con vanagloria. Es más dramático del lado que se lo quiera ver, para algunos más emocionante, y puede ser, por ese carácter de imprevisto que le damos a las cosas que suceden, pero la idea del destino nos deja más tranquilos en las cosas malas, y agradecidos de las cosas buenas. Creer en la providencia da tranquilidad, porque creemos en Dios, que al final siempre hay algo bueno. En cambio al creer en el azar nos desesperamos por que las cosas salgan bien ya que creemos que dependemos de nosotros en buena medida en cuanto a los resultados. En cuanto al destino también dependemos de nosotros, pero como creemos que hay un ser supremo que todo lo sabe, que nos ayuda o que nos corrige para un final feliz, que permite que seamos felices en determinadas situaciones o que suframos de otras para llevarnos algo útil, también dependemos de nosotros para muchos logros, pero con la idea de que Dios está a nuestro lado acompañándonos y guiándonos.
El azar está más bien ligado a los ateos, en cambio el destino a la Fe.
A muchos, incluso creyentes, no les parece convincente la idea de "destino", porque creen que no podemos hacer nada para cambiar el presente y nuestro futuro, como si todo estuviera escrito. Pero aunque esté escrito, vivimos esa película y somos responsables de ella. Dios sabe de antemano lo que va a suceder, y conoce nuestro corazón, por eso determina cosas que deben presentarse para nuestra madurez. Nosotros tenemos una condición, y esa condición es en mucho lo que depende que Dios ponga en nuestro camino. De todas formas no hay que desesperarse cuando algo no sale como uno pretende, a veces no lo comprendemos, pero debemos entender que así Dios lo quiere. Y si Dios lo quiere es porque conviene. Amén.
Las personas creyentes o no siempre nos preguntamos si todo lo que nos acontece es por pura casualidad o porque está escrito que sea así...
En el foro donde participo este tema se ha discutido hasta el hartazgo, y hay muchos argumentos en pro y en contra.
Se dice que es un poco injusto que las cosas estén previstas, porque es como que nuestra libertad está anulada, y entre otras cuestiones esta idea deja mal parado a Dios si tenemos en cuenta todas las cosas malas que pasan.
Mi argumento es que los cristianos creemos que el bien está resguardado por Dios, y que todo lo que sucede malo o bueno es conveniente, que al final todo tiene un plan benigno previsto por Dios con un final feliz.
Se dice que nuestra libertad estaría anulada, pero no es así. Es difícil conciliar la idea del destino con la libertad en pocas palabras, pero puede comprenderse. La libertad no está anulada, pero existen los límites, no todo lo que queremos se puede conseguir, Dios es nuestro guía y árbitro. Que Él decida nuestros destinos no es malo, porque si es nuestro rector pero a cambio somos felices ¿Qué importa pues? En cambio si somos libres e independientes y prescindimos de Dios pero a cambio debemos sufrir por conseguir todo lo que necesitamos, no es un buen negocio.
No somos títeres de Dios, tenemos voluntad y también libertad, pero Dios también tiene libertad y voluntad, por ello se conjugan ambas voluntades la de Dios y la del hombre. Es una relación la que vive el hombre con Dios.
Pero Dios es nuestro Señor, esa es la diferencia, nosotros somos servidores de él, aunque en definitiva Dios termina siendo servidor del hombre.
Dios tiene un plan para cada uno, la línea está trazada ¿Y eso anula nuestra libertad? Claro que no, pero como dije anteriormente, existen límites, no todo lo que anhelamos lo podemos conseguir.
Todo lo que sucede está previsto, las personas que se cruzan en nuestras vidas no son por puro azar, conocer a la mujer de mi vida y casarme con ella no es suerte como tampoco mero mérito por la conquista. Y las personas que perdemos no es algo que se podría haber evitado del todo, sino que a veces está previsto que sea así.
Es mejor creer que las cosas suceden porque así está previsto antes que el puro azar, porque eso es creer en Dios, que él tiene un plan para cada uno, y que anhela lo mejor para nosotros, así seamos solteros, pobres, o ricos o casados, con hijos, etc. Todo lo que sucede es conveniente.
La libertad absoluta no existe, como tampoco somos títeres. Existe la felicidad si obedecemos a Dios, y la infelicidad si le rechazamos.
El mundo está guiado, y la creación está guiada. Dios acompaña al hombre y lo guía.
Incluso hasta las cosas malas están previstas y permitidas, por alguna razón. Es la pregunta del millón ¿Si Dios es justo y bueno por qué hay guerras y hambre en el mundo? ¿Si Dios decide los destinos por qué todo ello, acaso es un mal Dios?
Lo cierto es que quisiéramos explicar todo como para justificar a Dios, pero lo que creemos es que todo sucede por algo y que tiene final feliz, así lo creemos, que es conveniente por alguna razón. Y lo cierto es que esto nos da más ánimos que pensar que no hay Dios y que todo se maneja con el azar, que todo lo ganamos o lo perdemos dependiendo de nosotros, así vivimos los fracasos con mucha culpa y las victorias con vanagloria. Es más dramático del lado que se lo quiera ver, para algunos más emocionante, y puede ser, por ese carácter de imprevisto que le damos a las cosas que suceden, pero la idea del destino nos deja más tranquilos en las cosas malas, y agradecidos de las cosas buenas. Creer en la providencia da tranquilidad, porque creemos en Dios, que al final siempre hay algo bueno. En cambio al creer en el azar nos desesperamos por que las cosas salgan bien ya que creemos que dependemos de nosotros en buena medida en cuanto a los resultados. En cuanto al destino también dependemos de nosotros, pero como creemos que hay un ser supremo que todo lo sabe, que nos ayuda o que nos corrige para un final feliz, que permite que seamos felices en determinadas situaciones o que suframos de otras para llevarnos algo útil, también dependemos de nosotros para muchos logros, pero con la idea de que Dios está a nuestro lado acompañándonos y guiándonos.
El azar está más bien ligado a los ateos, en cambio el destino a la Fe.
A muchos, incluso creyentes, no les parece convincente la idea de "destino", porque creen que no podemos hacer nada para cambiar el presente y nuestro futuro, como si todo estuviera escrito. Pero aunque esté escrito, vivimos esa película y somos responsables de ella. Dios sabe de antemano lo que va a suceder, y conoce nuestro corazón, por eso determina cosas que deben presentarse para nuestra madurez. Nosotros tenemos una condición, y esa condición es en mucho lo que depende que Dios ponga en nuestro camino. De todas formas no hay que desesperarse cuando algo no sale como uno pretende, a veces no lo comprendemos, pero debemos entender que así Dios lo quiere. Y si Dios lo quiere es porque conviene. Amén.
jueves, 31 de enero de 2013
Segunda Venida ¿Nace otra vez?
La Segunda Venida:
Muchos cristianos solemos creer que ya sabemos todo el proceso histórico de la Segunda Venida, como si tuviésemos incorporada la película de todo lo que va a acontecer y de lo que no. Tomamos tan textual las palabras de Jesús en referencia a su Segunda Venida que no la imaginamos de ninguna otra forma que la clásica, como se aprecia en la imagen, que ya más que una pintura para muchos debería ser una foto.
Yo planteo lo siguiente: ¿Cómo viene Cristo, nace otra vez fruto de un Milagro o viene como se lo aprecia en la Imagen?
Nunca dijo que iba a nacer de vuelta, porque para muchos eso es como hacer referencia a la reencarnación. En otro tema sobre la vida en otros planetas hablé de la posibilidad de que Cristo pueda venir más de una vez como en su vez primera, o sea "nacer o encarnarse más de una vez".
Todo lo escrito que hace referencia a su Segunda Venida está pronunciado en forma simbólica, no se puede tomar como si se tratase de historia traída del futuro como hacemos muchos. Cito el texto del Evangelio de Lucas:
21:25 Entonces habrá señales en el sol, en la luna y en las estrellas, y en la tierra angustia de las gentes, confundidas a causa del bramido del mar y de las olas;
21:26 desfalleciendo los hombres por el temor y la expectación de las cosas que sobrevendrán en la tierra; porque las potencias de los cielos serán conmovidas.
21:27 Entonces verán al Hijo del Hombre, que vendrá en una nube con poder y gran gloria.
21:28 Cuando estas cosas comiencen a suceder, erguíos y levantad vuestra cabeza, porque vuestra redención está cerca.
En los versículos 25 y 26 se habla de cosas que van a acontecer, un Gran Milagro, el Clima, una Gran Guerra y un cambio de consciencia, todo eso antes de la venida del Mesías que será pronta.
En el versículo 27, textualmente dice que vendrá en una nube, o sea que tal relato hace pensar que aparece en el Cielo, y nos llevaría a descartar la posibilidad de que vuelva a nacer.
También en el Libro de Malaquías, profetizaba la venida del Profeta Elías para antes del Mesías. Si lo tomamos textualmente esa profecía no se cumplió, porque no vino Elías sino Juan el Bautista, quien Cristo lo identifica como Elías mismo ¿Pues no podrá suceder para esta Segunda Venida de Cristo de una forma similar?
Los judíos más ortodoxos no se convirtieron al cristianismo justamente por estas razones, no vieron en Jesús cumplidas las profecías del Antiguo Testamento tal como ellos esperaban ¿Pues podrá repetirse tal actitud pero esta vez en los cristianos?
Como le decía a un colega del foro en donde participo por la web, por ahí Dios no revela a todo detalle todo lo que va a ocurrir por alguna razón. Quienes se hicieron cristianos no fueron los judíos que eran el pueblo elegido, sino los paganos que nada tenían que ver ¿Pues seremos los cristianos tan tiesos como lo fueron nuestros antepasados los judíos? Es que tanta erudición en las escrituras nos hace más incrédulos de los hechos, porque interpretamos lo que va a ocurrir, y si no es como lo pensamos lo cuestionamos. Los paganos fueron más humildes, porque no les importaba que los judíos tengan razón, sino que se entregaron a Cristo por el corazón, el amor y la fe. En su vida encontraron consuelo en el cristianismo, no se fueron al Antiguo Testamento para validar al cristianismo. Creo que muchas veces Dios hace las cosas más misteriosas y sorprendentes porque no busca la obviedad para una conversión, o sea por medio de la lógica y la razón, sino por el corazón. Los más eruditos en las escrituras fueron los más reacios a la conversión.
Por ello, si a Dios se le ocurre nacer de nuevo, muchos no le creerán por las muchas razones expuestas.
Muchos cristianos solemos creer que ya sabemos todo el proceso histórico de la Segunda Venida, como si tuviésemos incorporada la película de todo lo que va a acontecer y de lo que no. Tomamos tan textual las palabras de Jesús en referencia a su Segunda Venida que no la imaginamos de ninguna otra forma que la clásica, como se aprecia en la imagen, que ya más que una pintura para muchos debería ser una foto.
Yo planteo lo siguiente: ¿Cómo viene Cristo, nace otra vez fruto de un Milagro o viene como se lo aprecia en la Imagen?
Nunca dijo que iba a nacer de vuelta, porque para muchos eso es como hacer referencia a la reencarnación. En otro tema sobre la vida en otros planetas hablé de la posibilidad de que Cristo pueda venir más de una vez como en su vez primera, o sea "nacer o encarnarse más de una vez".
Todo lo escrito que hace referencia a su Segunda Venida está pronunciado en forma simbólica, no se puede tomar como si se tratase de historia traída del futuro como hacemos muchos. Cito el texto del Evangelio de Lucas:
21:25 Entonces habrá señales en el sol, en la luna y en las estrellas, y en la tierra angustia de las gentes, confundidas a causa del bramido del mar y de las olas;
21:26 desfalleciendo los hombres por el temor y la expectación de las cosas que sobrevendrán en la tierra; porque las potencias de los cielos serán conmovidas.
21:27 Entonces verán al Hijo del Hombre, que vendrá en una nube con poder y gran gloria.
21:28 Cuando estas cosas comiencen a suceder, erguíos y levantad vuestra cabeza, porque vuestra redención está cerca.
En los versículos 25 y 26 se habla de cosas que van a acontecer, un Gran Milagro, el Clima, una Gran Guerra y un cambio de consciencia, todo eso antes de la venida del Mesías que será pronta.
En el versículo 27, textualmente dice que vendrá en una nube, o sea que tal relato hace pensar que aparece en el Cielo, y nos llevaría a descartar la posibilidad de que vuelva a nacer.
También en el Libro de Malaquías, profetizaba la venida del Profeta Elías para antes del Mesías. Si lo tomamos textualmente esa profecía no se cumplió, porque no vino Elías sino Juan el Bautista, quien Cristo lo identifica como Elías mismo ¿Pues no podrá suceder para esta Segunda Venida de Cristo de una forma similar?
Los judíos más ortodoxos no se convirtieron al cristianismo justamente por estas razones, no vieron en Jesús cumplidas las profecías del Antiguo Testamento tal como ellos esperaban ¿Pues podrá repetirse tal actitud pero esta vez en los cristianos?
Como le decía a un colega del foro en donde participo por la web, por ahí Dios no revela a todo detalle todo lo que va a ocurrir por alguna razón. Quienes se hicieron cristianos no fueron los judíos que eran el pueblo elegido, sino los paganos que nada tenían que ver ¿Pues seremos los cristianos tan tiesos como lo fueron nuestros antepasados los judíos? Es que tanta erudición en las escrituras nos hace más incrédulos de los hechos, porque interpretamos lo que va a ocurrir, y si no es como lo pensamos lo cuestionamos. Los paganos fueron más humildes, porque no les importaba que los judíos tengan razón, sino que se entregaron a Cristo por el corazón, el amor y la fe. En su vida encontraron consuelo en el cristianismo, no se fueron al Antiguo Testamento para validar al cristianismo. Creo que muchas veces Dios hace las cosas más misteriosas y sorprendentes porque no busca la obviedad para una conversión, o sea por medio de la lógica y la razón, sino por el corazón. Los más eruditos en las escrituras fueron los más reacios a la conversión.
Por ello, si a Dios se le ocurre nacer de nuevo, muchos no le creerán por las muchas razones expuestas.
lunes, 28 de enero de 2013
El Hombre en el Edén
¿Existieron Adán y Eva?
La pregunta que todos se hacen. Como venía tratando en otros temas, si el hombre proviene de una cadena evolutiva, entonces no fue creado del barro?
El origen de la vida es un tema intrigante también con muchos enigmas, pues ahí también podríamos preguntarnos "en qué momento o instante hay vida", si también fue un proceso evolutivo. Lo cierto es que el relato del Génesis no erra en cuanto a la realidad espiritual, ya que el fin de la Biblia no es ser un documento científico sino una guía de fe. El relato de la creación es muy antiguo, recordemos que el hombre en tiempos remotos no poseía los descubrimientos que hoy se tienen y documentaba mediante los conocimientos limitados que tenía en mano y para que pueda entender la gente.
El relato de la Creación puede que tenga un poco más de diez mil años de antigüedad, en donde ahora es Irak en una civilización antigua en la costa del golfo Pérsico. Pero la pregunta es si existieron Adán y Eva, si vivieron en esa época en ese lugar geográfico, y si ahí fue la creación del hombre y en esas fechas? Según todo lo que la ciencia ha aportado, el hombre proviene de una cadena evolutiva y tiene más de diez mil años de antigüedad y no fue creado del barro así de un instante para el otro. Pero si podríamos decir que proviene de la tierra, si la vida se ha generado en este planeta, pero tras una evolución y en millones de años pues, quizás la creación del hombre fue tras una evolución de las especies, o sea que en esa evolución hubo un acompañamiento de Dios, tal vez podríamos pensarlo así.
Pero yéndonos al tema, a Adán y Eva ¿Existieron? Quizás ¿Pero fue hace diez mil años que vivieron? Probablemente, o quizás forman parte de un relato independiente de que hayan existido o no.
Recordemos que Adán y Eva el primer lugar donde estuvieron fue en el Edén, o sea en el Paraíso, pero sabemos bien que el Paraíso o el Cielo es el Reino de Dios, y es un mundo espiritual. La Biblia enseña que Dios creó además del hombre a los ángeles, seres netamente espirituales. Bueno, yo creo que en realidad, y como afirma Cristo en el Evangelio, nuestro Destino es estar junto a él en el Cielo, y como señala, ahí no tomaremos ni marido ni mujer porque "seremos como ángeles en el Cielo", o sea seres espirituales ¿Y no podría habernos creado primeramente como seres espirituales? Quiero decir que si el Cielo, el Paraíso, es un mundo espiritual, Adán y Eva no fueron seres espirituales quizás?
Muchos conocemos el relato de que todo el conflicto se inicia por un ángel, Lucifer, Satanás, que quiere ser como Dios y codicia todo lo que le pertenece, de ahí parte todo, y es él supuestamente quien tienta a la mujer y al hombre para ser como Dios.
La serpiente simboliza la tentación, y Adán y Eva representan a toda la humanidad a toda la creación caída en pecado, inclúyase a los ángeles. Porque probablemente en realidad cuando fuimos creados a imagen y semejanza de Dios éramos como ángeles, seres espirituales, pero sucedió lo que alegóricamente nos cuenta el relato de la caída en el Libro Génesis. El hombre o los ángeles quisieron ser como Dios, querían saber, querían poseer todo el conocimiento, querían ser libres, independientes, autónomos, etc. Todos los pecados que poseemos los hombres que anhelan el poder. Querían ser reyes, querían probar el adulterio, pasarse de la línea en definitiva, violar los límites y desconocer a Dios como nuestro Señor. Adán y Eva es toda la humanidad, toda la creación caída en pecado, nosotros, los ángeles. Porque el Paraíso era espiritual era el Reino de Dios, y la creación se rebeló contra su Creador, manchó su compromiso, cometió adulterio, ultrajó a Dios, a Cristo cara a cara. Luego de ese hecho se manchó todo, nada podía ser igual, por ello Dios expulsó al hombre, a los ángeles del Cielo, nos divorciamos de Dios, nos quedamos sin Dios, borrado de nuestros recuerdos y de nuestra mente, como si fuera una idea lejana que ocupa un lugar efímero en nuestro subconsciente, así fue. Pero Dios en su misericordia, y sin merecerlo se rebajó a nuestra condición, nos buscó injustamente, porque él que es Digno y nosotros indignos que de paso lo rechazamos. Entonces Dios creó un plan, este mundo, para rectificarnos y recuperarnos, pero a base del perdón, la dignidad ya no ocupa lugar en nuestras vidas, solo la misericordia, no merecemos el Cielo, pues nos es regalado, ofrecido gratuitamente y generosamente.
Adán y Eva existieron, somos nosotros, es el relato de lo que sucedió cuando fuimos creados, cuando éramos seres espirituales y vivíamos en nuestro Hogar el Paraíso, pero tras el pecado fuimos arrojados a este mundo, mitad Infierno y mitad Cielo, como una opción para retomar el camino hacia Dios nuevamente colado por el sufrimiento.
Tengo una teoría que en la caída nadie se salvó, solo Dios que es Digno, que no hubo ser que no haya pecado excepto Dios, como Pedro cuando le dijo a Jesús que lo seguiría a la muerte y lo negó tres veces, hasta el que se creía más digno cayó. Solo Dios se mantuvo inamovible e inmutable. En el Último Día el Hombre salvo regresará al Paraíso junto a la presencia de Dios, al Edén, al Reino de los Cielos prometido, de dónde venimos, nuestro Origen. El Edén donde Adán y Eva estuvieron es el Reino de los Cielos, y es un mundo espiritual, pero el Génesis lo relata para nuestro entendimiento como si todo hubiera ocurrido en este planeta, aunque agrego que todo lo que sucedió está presente en todos nosotros, o sea todo el pecado cometido se sigue manifestando en nuestras vidas y es la matrícula que llevamos del Pecado Original que Cristo vence y se hace con el Honor de ser el Nuevo Adán, el Adán Santo que reemplaza al viejo que pecó, y el que nos regresará.
La pregunta que todos se hacen. Como venía tratando en otros temas, si el hombre proviene de una cadena evolutiva, entonces no fue creado del barro?
El origen de la vida es un tema intrigante también con muchos enigmas, pues ahí también podríamos preguntarnos "en qué momento o instante hay vida", si también fue un proceso evolutivo. Lo cierto es que el relato del Génesis no erra en cuanto a la realidad espiritual, ya que el fin de la Biblia no es ser un documento científico sino una guía de fe. El relato de la creación es muy antiguo, recordemos que el hombre en tiempos remotos no poseía los descubrimientos que hoy se tienen y documentaba mediante los conocimientos limitados que tenía en mano y para que pueda entender la gente.
El relato de la Creación puede que tenga un poco más de diez mil años de antigüedad, en donde ahora es Irak en una civilización antigua en la costa del golfo Pérsico. Pero la pregunta es si existieron Adán y Eva, si vivieron en esa época en ese lugar geográfico, y si ahí fue la creación del hombre y en esas fechas? Según todo lo que la ciencia ha aportado, el hombre proviene de una cadena evolutiva y tiene más de diez mil años de antigüedad y no fue creado del barro así de un instante para el otro. Pero si podríamos decir que proviene de la tierra, si la vida se ha generado en este planeta, pero tras una evolución y en millones de años pues, quizás la creación del hombre fue tras una evolución de las especies, o sea que en esa evolución hubo un acompañamiento de Dios, tal vez podríamos pensarlo así.
Pero yéndonos al tema, a Adán y Eva ¿Existieron? Quizás ¿Pero fue hace diez mil años que vivieron? Probablemente, o quizás forman parte de un relato independiente de que hayan existido o no.
Recordemos que Adán y Eva el primer lugar donde estuvieron fue en el Edén, o sea en el Paraíso, pero sabemos bien que el Paraíso o el Cielo es el Reino de Dios, y es un mundo espiritual. La Biblia enseña que Dios creó además del hombre a los ángeles, seres netamente espirituales. Bueno, yo creo que en realidad, y como afirma Cristo en el Evangelio, nuestro Destino es estar junto a él en el Cielo, y como señala, ahí no tomaremos ni marido ni mujer porque "seremos como ángeles en el Cielo", o sea seres espirituales ¿Y no podría habernos creado primeramente como seres espirituales? Quiero decir que si el Cielo, el Paraíso, es un mundo espiritual, Adán y Eva no fueron seres espirituales quizás?
Muchos conocemos el relato de que todo el conflicto se inicia por un ángel, Lucifer, Satanás, que quiere ser como Dios y codicia todo lo que le pertenece, de ahí parte todo, y es él supuestamente quien tienta a la mujer y al hombre para ser como Dios.
La serpiente simboliza la tentación, y Adán y Eva representan a toda la humanidad a toda la creación caída en pecado, inclúyase a los ángeles. Porque probablemente en realidad cuando fuimos creados a imagen y semejanza de Dios éramos como ángeles, seres espirituales, pero sucedió lo que alegóricamente nos cuenta el relato de la caída en el Libro Génesis. El hombre o los ángeles quisieron ser como Dios, querían saber, querían poseer todo el conocimiento, querían ser libres, independientes, autónomos, etc. Todos los pecados que poseemos los hombres que anhelan el poder. Querían ser reyes, querían probar el adulterio, pasarse de la línea en definitiva, violar los límites y desconocer a Dios como nuestro Señor. Adán y Eva es toda la humanidad, toda la creación caída en pecado, nosotros, los ángeles. Porque el Paraíso era espiritual era el Reino de Dios, y la creación se rebeló contra su Creador, manchó su compromiso, cometió adulterio, ultrajó a Dios, a Cristo cara a cara. Luego de ese hecho se manchó todo, nada podía ser igual, por ello Dios expulsó al hombre, a los ángeles del Cielo, nos divorciamos de Dios, nos quedamos sin Dios, borrado de nuestros recuerdos y de nuestra mente, como si fuera una idea lejana que ocupa un lugar efímero en nuestro subconsciente, así fue. Pero Dios en su misericordia, y sin merecerlo se rebajó a nuestra condición, nos buscó injustamente, porque él que es Digno y nosotros indignos que de paso lo rechazamos. Entonces Dios creó un plan, este mundo, para rectificarnos y recuperarnos, pero a base del perdón, la dignidad ya no ocupa lugar en nuestras vidas, solo la misericordia, no merecemos el Cielo, pues nos es regalado, ofrecido gratuitamente y generosamente.
Adán y Eva existieron, somos nosotros, es el relato de lo que sucedió cuando fuimos creados, cuando éramos seres espirituales y vivíamos en nuestro Hogar el Paraíso, pero tras el pecado fuimos arrojados a este mundo, mitad Infierno y mitad Cielo, como una opción para retomar el camino hacia Dios nuevamente colado por el sufrimiento.
Tengo una teoría que en la caída nadie se salvó, solo Dios que es Digno, que no hubo ser que no haya pecado excepto Dios, como Pedro cuando le dijo a Jesús que lo seguiría a la muerte y lo negó tres veces, hasta el que se creía más digno cayó. Solo Dios se mantuvo inamovible e inmutable. En el Último Día el Hombre salvo regresará al Paraíso junto a la presencia de Dios, al Edén, al Reino de los Cielos prometido, de dónde venimos, nuestro Origen. El Edén donde Adán y Eva estuvieron es el Reino de los Cielos, y es un mundo espiritual, pero el Génesis lo relata para nuestro entendimiento como si todo hubiera ocurrido en este planeta, aunque agrego que todo lo que sucedió está presente en todos nosotros, o sea todo el pecado cometido se sigue manifestando en nuestras vidas y es la matrícula que llevamos del Pecado Original que Cristo vence y se hace con el Honor de ser el Nuevo Adán, el Adán Santo que reemplaza al viejo que pecó, y el que nos regresará.
viernes, 25 de enero de 2013
La Transmigración de las Almas
La Reencarnación:
Es un tema amplio y complejo, intentaremos desarrollarlo de la forma más breve posible.
Se cree que la reencarnación es una idea proveniente del Oriente, de la India y la China, pero en realidad tal creencia es tan vieja como la historia del hombre y de las civilizaciones. Ya antes que los hindúes y los chinos, los babilónicos y sus más antepasados creían, incluso los egipcios, y cientos de civilizaciones y pueblos antes del cristianismo y del Imperio Romano, por todas partes del mundo, no es un monopolio de la India y la China.
También se ha tomado tal idea en el mundo cristiano como diabólica y relacionándosela con el movimiento de la Nueva Era.
Yo soy cristiano y creo en la reencarnación y les plantearé algo que puede justificarla: Por ejemplo, se sabe desde la fe cristiana que habrá un día del Juicio y de la Resurrección, pero pregunto ¿Quiénes serán juzgados en tal día? A los cristianos se nos juzgará según el Evangelio que conocemos, pero quienes hayan resucitado y no conocieron el Evangelio en sus vidas, o sea las personas que han vivido antes de Cristo no pueden ser juzgadas según el Evangelio porque no lo conocieron y no vivieron según sus mandatos.
¿Ahora, cuál es el sentido de conocer el Evangelio, la Salvación y el Juicio? Algunos afirman que esos que vivieron antes de Cristo han sido enseñados por él en el Infierno, cuando se afirma en el Credo católico "descendió a los Infiernos" ¿Pero si tuviera que ser así, por qué no fue igual para todos? Algunos dirán que es problema de Dios... Pero la vida de cada individuo que haya vivido sin conocer a Cristo y el Evangelio no podría ser tenida en cuenta en el día del Juicio, o sea que no podrían ser juzgados más que por las leyes que se han regido, lo que han conocido por justo e injusto. Pues así podría no haber venido Cristo y hubiera hecho igual Dios para todos, pero no fue así, sino que vino para enseñarnos una Doctrina y no tan solo Salvarnos, sino para ser perfectos como fieles, y quienes no se formaron según las enseñanzas de Cristo continuaron en la barbarie y deberían tener la misma oportunidad que cualquier cristiano de poder hacer una vida según el Evangelio.
Por ello, yo creo que aquellos que se quedaron sin Mesías y sin Evangelio, no sucedió, sino que lo conocieron, porque aquellos que vivieron antes de Cristo, pues vivieron después también, porque han reencarnado.
Ahora se plantea otro dilema: ¿Y la Resurrección? Pues de la Resurrección que habla Cristo es de la Vuelta al Paraíso, que la desarrollaré luego, pero para no dejarlos con los brazos vacíos, diré que habrá una Resurrección de los Muertos el día del Arrebato, el día de la Salvación y de la migración al Paraíso, al Cielo prometido.
Pero para mejor entenderlo, el ciclo de reencarnaciones no es eterno, sino que es evolutivo y tiene un final, el Cielo o el Infierno.
Muchos de los que creen en la reencarnación conocen un concepto llamado Karma, del que creen. Este concepto para definirlo, diré que son los premios y castigos de lo que uno hace en vida, que puede generarse en vida misma o reflejado en otras reencarnaciones. Los hindúes creen que si una persona ha sido muy mala, en las próximas reencarnaciones involuciona, o sea que reencarna en un ser inferior como un animal, y si fue una persona buena reencarna en una persona de una escala social mejor. Diré al respecto que no estoy tan seguro de ello, y que no hay castigos para Dios, sino que todo lo que sucede es para la mejora de la persona, si se padece de algo es para una superación, no como una venganza. Esa es mi idea, incluso el infierno es un estado generado por nosotros, que luego en otro tema también ampliaré sobre ello. Pero si queremos estar mejor, lo que debemos hacer es buscar a Dios y hacer lo que nos ha enseñado, y generalmente debemos ser humildes, es el padecimiento que él ha puesto para nosotros para que seamos felices y que tanto nos cuesta.
Pero en sí, la salvación no depende de nuestros propios méritos, no vamos al Cielo por una evolución de una mejora del comportamiento en una serie de reencarnaciones como se cree en otras religiones, es Cristo el que nos salva, y no hay un fin del ciclo de reencarnaciones que depende de nosotros para ascender al Cielo como muchos creen, pues el Cielo es un regalo de Dios, que vendrá cuando él lo determine el día del Juicio Final, que es donde yo creo donde se define el destino de las almas.
Pero el sentido de la reencarnación es que estamos atados a este mundo, aprendiendo y mejorando en cada vida y preparándonos para recibir a Dios en algún día.
Esta doctrina de la reencarnación se cree contradictoria con el cristianismo, porque se dice que no se ha enseñado en la Biblia. Jesús no la enseñó pero tampoco la repudió, no habló de ella, pero hizo referencia cuando le preguntan sobre si tenía que venir antes el profeta Elías como lo enseña el Libro de Malaquías, y Jesús respondió que esa profecía se cumplió en Juan el Bautista, que es el Elías que había de venir. Pero el profeta Elías recordemos que fue arrebatado por un carro de fuego como enseñan las Escrituras, y Juan el Bautista nació de la prima de María madre de Jesús ¿Pues fue reencarnación? Yo creo que sí, pero cada cristiano que la repudie buscará una salida, aunque según mi experiencia en debates sobre este tema, no han brindado una respuesta sólida al respecto.
Pero lo cierto, y lo he probado, que se puede ser cristiano y creer en la reencarnación sin contradicciones al Evangelio y la Biblia entera, que amplía e ilumina muchos conceptos y brinda respuestas a inquietudes surgidas en estos tiempos.
Luego podríamos plantearnos sobre ello, si Dios puede encarnar más de una vez. Esto lo desarrollaré más adelante, y veremos que si de ser posible no contradice nada. Pero para no dejarlos confundidos, diré que el Plan de Dios concluye en Dios, que el hombre conoce a Dios al final de su camino, que Cristo es Único y que se ha rebajado a nuestra naturaleza para salvarnos, que su Misión es la Salvación del Hombre, y estamos en los fines de los tiempos, porque él ya ha venido, se aproxima el día de nuestro encuentro con Dios en el Cielo.
Como verán es un tema complejo, ya que rompe con todos los esquemas de un cristiano cualquiera, y dar a entender esto es romper con toda la estructura de creencia para conciliar con su Fe. No es fácil y de seguro la mayoría, por no decir todos, no entienden, y lo comprendo.
Saludos, que tengan un buen día.
Es un tema amplio y complejo, intentaremos desarrollarlo de la forma más breve posible.
Se cree que la reencarnación es una idea proveniente del Oriente, de la India y la China, pero en realidad tal creencia es tan vieja como la historia del hombre y de las civilizaciones. Ya antes que los hindúes y los chinos, los babilónicos y sus más antepasados creían, incluso los egipcios, y cientos de civilizaciones y pueblos antes del cristianismo y del Imperio Romano, por todas partes del mundo, no es un monopolio de la India y la China.
También se ha tomado tal idea en el mundo cristiano como diabólica y relacionándosela con el movimiento de la Nueva Era.
Yo soy cristiano y creo en la reencarnación y les plantearé algo que puede justificarla: Por ejemplo, se sabe desde la fe cristiana que habrá un día del Juicio y de la Resurrección, pero pregunto ¿Quiénes serán juzgados en tal día? A los cristianos se nos juzgará según el Evangelio que conocemos, pero quienes hayan resucitado y no conocieron el Evangelio en sus vidas, o sea las personas que han vivido antes de Cristo no pueden ser juzgadas según el Evangelio porque no lo conocieron y no vivieron según sus mandatos.
¿Ahora, cuál es el sentido de conocer el Evangelio, la Salvación y el Juicio? Algunos afirman que esos que vivieron antes de Cristo han sido enseñados por él en el Infierno, cuando se afirma en el Credo católico "descendió a los Infiernos" ¿Pero si tuviera que ser así, por qué no fue igual para todos? Algunos dirán que es problema de Dios... Pero la vida de cada individuo que haya vivido sin conocer a Cristo y el Evangelio no podría ser tenida en cuenta en el día del Juicio, o sea que no podrían ser juzgados más que por las leyes que se han regido, lo que han conocido por justo e injusto. Pues así podría no haber venido Cristo y hubiera hecho igual Dios para todos, pero no fue así, sino que vino para enseñarnos una Doctrina y no tan solo Salvarnos, sino para ser perfectos como fieles, y quienes no se formaron según las enseñanzas de Cristo continuaron en la barbarie y deberían tener la misma oportunidad que cualquier cristiano de poder hacer una vida según el Evangelio.
Por ello, yo creo que aquellos que se quedaron sin Mesías y sin Evangelio, no sucedió, sino que lo conocieron, porque aquellos que vivieron antes de Cristo, pues vivieron después también, porque han reencarnado.
Ahora se plantea otro dilema: ¿Y la Resurrección? Pues de la Resurrección que habla Cristo es de la Vuelta al Paraíso, que la desarrollaré luego, pero para no dejarlos con los brazos vacíos, diré que habrá una Resurrección de los Muertos el día del Arrebato, el día de la Salvación y de la migración al Paraíso, al Cielo prometido.
Pero para mejor entenderlo, el ciclo de reencarnaciones no es eterno, sino que es evolutivo y tiene un final, el Cielo o el Infierno.
Muchos de los que creen en la reencarnación conocen un concepto llamado Karma, del que creen. Este concepto para definirlo, diré que son los premios y castigos de lo que uno hace en vida, que puede generarse en vida misma o reflejado en otras reencarnaciones. Los hindúes creen que si una persona ha sido muy mala, en las próximas reencarnaciones involuciona, o sea que reencarna en un ser inferior como un animal, y si fue una persona buena reencarna en una persona de una escala social mejor. Diré al respecto que no estoy tan seguro de ello, y que no hay castigos para Dios, sino que todo lo que sucede es para la mejora de la persona, si se padece de algo es para una superación, no como una venganza. Esa es mi idea, incluso el infierno es un estado generado por nosotros, que luego en otro tema también ampliaré sobre ello. Pero si queremos estar mejor, lo que debemos hacer es buscar a Dios y hacer lo que nos ha enseñado, y generalmente debemos ser humildes, es el padecimiento que él ha puesto para nosotros para que seamos felices y que tanto nos cuesta.
Pero en sí, la salvación no depende de nuestros propios méritos, no vamos al Cielo por una evolución de una mejora del comportamiento en una serie de reencarnaciones como se cree en otras religiones, es Cristo el que nos salva, y no hay un fin del ciclo de reencarnaciones que depende de nosotros para ascender al Cielo como muchos creen, pues el Cielo es un regalo de Dios, que vendrá cuando él lo determine el día del Juicio Final, que es donde yo creo donde se define el destino de las almas.
Pero el sentido de la reencarnación es que estamos atados a este mundo, aprendiendo y mejorando en cada vida y preparándonos para recibir a Dios en algún día.
Esta doctrina de la reencarnación se cree contradictoria con el cristianismo, porque se dice que no se ha enseñado en la Biblia. Jesús no la enseñó pero tampoco la repudió, no habló de ella, pero hizo referencia cuando le preguntan sobre si tenía que venir antes el profeta Elías como lo enseña el Libro de Malaquías, y Jesús respondió que esa profecía se cumplió en Juan el Bautista, que es el Elías que había de venir. Pero el profeta Elías recordemos que fue arrebatado por un carro de fuego como enseñan las Escrituras, y Juan el Bautista nació de la prima de María madre de Jesús ¿Pues fue reencarnación? Yo creo que sí, pero cada cristiano que la repudie buscará una salida, aunque según mi experiencia en debates sobre este tema, no han brindado una respuesta sólida al respecto.
Pero lo cierto, y lo he probado, que se puede ser cristiano y creer en la reencarnación sin contradicciones al Evangelio y la Biblia entera, que amplía e ilumina muchos conceptos y brinda respuestas a inquietudes surgidas en estos tiempos.
Luego podríamos plantearnos sobre ello, si Dios puede encarnar más de una vez. Esto lo desarrollaré más adelante, y veremos que si de ser posible no contradice nada. Pero para no dejarlos confundidos, diré que el Plan de Dios concluye en Dios, que el hombre conoce a Dios al final de su camino, que Cristo es Único y que se ha rebajado a nuestra naturaleza para salvarnos, que su Misión es la Salvación del Hombre, y estamos en los fines de los tiempos, porque él ya ha venido, se aproxima el día de nuestro encuentro con Dios en el Cielo.
Como verán es un tema complejo, ya que rompe con todos los esquemas de un cristiano cualquiera, y dar a entender esto es romper con toda la estructura de creencia para conciliar con su Fe. No es fácil y de seguro la mayoría, por no decir todos, no entienden, y lo comprendo.
Saludos, que tengan un buen día.
martes, 22 de enero de 2013
¿Otros Mundos?
Vida en otros planetas?
En estos tiempos con el avance de los descubrimientos y la tecnología, desde la edad media en donde nuestro mundo se creía el centro del Universo, hoy podemos ver que no es así. Con el descubrimiento y la teoría heliocéntrica de Copérnico y las pruebas aportadas por Galileo Galilei, la Tierra no es el centro del Universo, los Astros no giran en torno a la Tierra, sino que la Tierra gira alrededor del Sol. Se rompe con aquella tradición ancestral y se marca un antes y un después que revoluciona al mundo.
Así uno se preguntará si es así que somos el centro del Universo, sino hay mundos como el nuestro más allá de nuestro alcance, si no estamos solos. Es una de las hipótesis que se hacen muchos entusiastas, es una pasión que incluso es llevada a los cines.
Muchos se pondrán en una posición en donde por no haber pruebas de la existencia de vida inteligente en otros mundos, siguen afirmando que somos el centro de la Creación.
¿Y si estamos equivocados? ¿Y si realmente no estamos solos en este Universo que planteo deberíamos hacernos?
¿Pues si de ser cierto que hubiera vida inteligente en otros planetas, qué hay de nuestras creencias cristianas, qué papel cumple Cristo en ese caso?
Pues yo me planteaba lo siguiente, pues qué plan de salvación podrían tener estos seres si no tienen un Mesías ni lo conocen. Pues deberían tener un Plan Divino si es que poseen espíritu inmortal como nosotros. Pero Cristo ha venido a nuestro mundo, creemos que es Único, que ha nacido una sola vez.
Podemos plantearnos muchas cosas, como por ejemplo que puede haber visitado esos otros mundos luego de haber ascendido a los Cielos, y se haya presentado como el Mesías y enseñado el camino de Salvación a esa gente de otros mundos. Pero también podríamos plantearnos que haya nacido en cada mundo como en el nuestro. No lo sabemos.
En el foro que sé nombrar, en el que he participado en la web, les hice este mismo planteamiento, algunos respondieron que quizás de haber vida en otros planetas, puede ser que no tengan el pecado original y no necesiten ser redimidos. Es todo un círculo de hipótesis de no acabar, pero como cristiano que soy, y que creo a Dios el ser Único por excelencia, el centro de todo lo existente y no existente, de lo conocido y desconocido, el Dios de todo, pues si hay vida en cualquier parte del Universo, nuestro Dios es su Dios también, y si nosotros le rendimos culto, ellos también deben hacerlo. Por lo que sería necesario que tengan un Plan Divino.
Si nosotros hemos tenido un proceso histórico que concluye en el Mesías, pues pienso que sería lógico quizás que en otros mundos suceda algo parecido ¿O Cristo ascendido al Cielo visitó a cada mundo, o cada mundo también tiene su Mesías, que en espíritu es el mismo en todas las versiones? Este último planteamiento podría llevarnos a una especie de idea de reencarnación del Mesías en distintos mundos. De seguro es chocante e inaceptable para muchos, que de momento no se puede ni afirmar ya que no hay pruebas de que haya vida inteligente y civilizaciones en otros planetas, pero lo cierto es que la idea está latente, y si fuera cierto como replantearíamos nuestro Credo?
En estos tiempos con el avance de los descubrimientos y la tecnología, desde la edad media en donde nuestro mundo se creía el centro del Universo, hoy podemos ver que no es así. Con el descubrimiento y la teoría heliocéntrica de Copérnico y las pruebas aportadas por Galileo Galilei, la Tierra no es el centro del Universo, los Astros no giran en torno a la Tierra, sino que la Tierra gira alrededor del Sol. Se rompe con aquella tradición ancestral y se marca un antes y un después que revoluciona al mundo.
Así uno se preguntará si es así que somos el centro del Universo, sino hay mundos como el nuestro más allá de nuestro alcance, si no estamos solos. Es una de las hipótesis que se hacen muchos entusiastas, es una pasión que incluso es llevada a los cines.
Muchos se pondrán en una posición en donde por no haber pruebas de la existencia de vida inteligente en otros mundos, siguen afirmando que somos el centro de la Creación.
¿Y si estamos equivocados? ¿Y si realmente no estamos solos en este Universo que planteo deberíamos hacernos?
¿Pues si de ser cierto que hubiera vida inteligente en otros planetas, qué hay de nuestras creencias cristianas, qué papel cumple Cristo en ese caso?
Pues yo me planteaba lo siguiente, pues qué plan de salvación podrían tener estos seres si no tienen un Mesías ni lo conocen. Pues deberían tener un Plan Divino si es que poseen espíritu inmortal como nosotros. Pero Cristo ha venido a nuestro mundo, creemos que es Único, que ha nacido una sola vez.
Podemos plantearnos muchas cosas, como por ejemplo que puede haber visitado esos otros mundos luego de haber ascendido a los Cielos, y se haya presentado como el Mesías y enseñado el camino de Salvación a esa gente de otros mundos. Pero también podríamos plantearnos que haya nacido en cada mundo como en el nuestro. No lo sabemos.
En el foro que sé nombrar, en el que he participado en la web, les hice este mismo planteamiento, algunos respondieron que quizás de haber vida en otros planetas, puede ser que no tengan el pecado original y no necesiten ser redimidos. Es todo un círculo de hipótesis de no acabar, pero como cristiano que soy, y que creo a Dios el ser Único por excelencia, el centro de todo lo existente y no existente, de lo conocido y desconocido, el Dios de todo, pues si hay vida en cualquier parte del Universo, nuestro Dios es su Dios también, y si nosotros le rendimos culto, ellos también deben hacerlo. Por lo que sería necesario que tengan un Plan Divino.
Si nosotros hemos tenido un proceso histórico que concluye en el Mesías, pues pienso que sería lógico quizás que en otros mundos suceda algo parecido ¿O Cristo ascendido al Cielo visitó a cada mundo, o cada mundo también tiene su Mesías, que en espíritu es el mismo en todas las versiones? Este último planteamiento podría llevarnos a una especie de idea de reencarnación del Mesías en distintos mundos. De seguro es chocante e inaceptable para muchos, que de momento no se puede ni afirmar ya que no hay pruebas de que haya vida inteligente y civilizaciones en otros planetas, pero lo cierto es que la idea está latente, y si fuera cierto como replantearíamos nuestro Credo?
lunes, 21 de enero de 2013
El Espíritu del Hombre en la Evolución
La Evolución
En este tema se discute mucho, por un lado está la posición de muchos cristianos en negar la evolución y en defender la creación del hombre como lo describe el Libro Génesis en la Biblia, o sea el hombre formado por Dios del barro y la mujer de una costilla del hombre.
Pero son innegables los descubrimientos, y la cadena evolutiva por la que ha pasado el hombre, hay evidencia material de todo ello.
En un foro de la web debatiendo, preguntando por la parte espiritual del hombre, pregunté si el "cavernícola" -por llamarlo vulgarmente- poseía alma. Algunos respondieron que es un animal, que no es un hombre y que no posee espíritu inmortal.
Bueno, yo creo en la evolución, me parece evidente, y creo que sería bastante difícil decir en qué momento el hombre se hace de espíritu inmortal en algún punto de la evolución. Yo creo que todo ser viviente posee espíritu inmortal, tanto el mono, el cavernícola como el hombre.
Debería responder los motivos y las razones de Dios para este asunto, y creo que el sentido de todo esto es que el espíritu inmortal que poseemos también evolucione, y estando en un cuerpo animal sufra, sienta dolores, desolación, hambre, etc, como también placer, complacencia, paz y descanso, y por qué no amor? Creo que el fin es que se acerque a los sentimientos, ya que el espíritu desde la caída está lleno de soberbia, vanidad, orgullo y un egoísmo absoluto. Por medio del sufrimiento y de los oasis que el ser viviente va encontrando en el camino, el espíritu va registrando e incorporando todo, y a medida que evoluciona la vida material lo va haciendo la espiritual. Esa es mi explicación, que me parece la más simple.
En otro momento hablaré del papel de Dios en el mundo, y del Cristo.
En este tema se discute mucho, por un lado está la posición de muchos cristianos en negar la evolución y en defender la creación del hombre como lo describe el Libro Génesis en la Biblia, o sea el hombre formado por Dios del barro y la mujer de una costilla del hombre.
Pero son innegables los descubrimientos, y la cadena evolutiva por la que ha pasado el hombre, hay evidencia material de todo ello.
En un foro de la web debatiendo, preguntando por la parte espiritual del hombre, pregunté si el "cavernícola" -por llamarlo vulgarmente- poseía alma. Algunos respondieron que es un animal, que no es un hombre y que no posee espíritu inmortal.
Bueno, yo creo en la evolución, me parece evidente, y creo que sería bastante difícil decir en qué momento el hombre se hace de espíritu inmortal en algún punto de la evolución. Yo creo que todo ser viviente posee espíritu inmortal, tanto el mono, el cavernícola como el hombre.
Debería responder los motivos y las razones de Dios para este asunto, y creo que el sentido de todo esto es que el espíritu inmortal que poseemos también evolucione, y estando en un cuerpo animal sufra, sienta dolores, desolación, hambre, etc, como también placer, complacencia, paz y descanso, y por qué no amor? Creo que el fin es que se acerque a los sentimientos, ya que el espíritu desde la caída está lleno de soberbia, vanidad, orgullo y un egoísmo absoluto. Por medio del sufrimiento y de los oasis que el ser viviente va encontrando en el camino, el espíritu va registrando e incorporando todo, y a medida que evoluciona la vida material lo va haciendo la espiritual. Esa es mi explicación, que me parece la más simple.
En otro momento hablaré del papel de Dios en el mundo, y del Cristo.
jueves, 10 de enero de 2013
Avivados e Inhibidos
Los Locos en la Antigüedad y en la Actualidad:
Los vikingos y los psiquiatras, interesante diferencia. En la época de los vikingos, un místico, una idea, o una acción se convertían en hecho y era creíble, no se cuestionaban mucho, porque eran paganos y muy crédulos en las señales y signos. Pues esos locos de la Alta Edad Media, en la actualidad están internados e inhibidos de toda pasión, medicados o maniatados, bajo tratamiento y observación. El vikingo era un guerrero que no miraba hacia atrás, dejaba toda su familia y vida, se unía a una tripulación y navegaban sin la certeza de un destino concreto, llegaban a otros pueblos y por su actitud bárbara saqueaban y tomaban todo, y hasta mataban para irse a otros pueblos y hacer lo mismo. Se terminaban asentando en algún lugar tomando la tierra y haciéndose señores de ella ¿Quién los frenaba, qué sentido tenían para comportarse así?
En cambio ya en el siglo XX y en el actual XXI, el hombre, el filósofo y el psiquiatra, se plantean cuestiones referidas al comportamiento humano y sus causas. Nuestro mundo es considerado civilizado al otro mundo de los vikingos como bárbaro e incivilizado. La razón es la ley, y todo debe someterse a ella. La ética, los buenos modales, y el buen comportamiento es lo debido, cualquier perturbación del orden en la persona es considerado una psicopatía, y cualquier perturbación en el orden público actos de delincuencia, todo ello condenable y puesto a examen, vigilancia y disciplina. Cualquier alegoría al misticismo sin una prueba y sin un evento examinable y que no se pueda explicar, ya es solo cosa de la persona y de su mente, y se debe poner a tratamiento médico para que no se manifiesten tales síntomas.
¿Con esta comparación me preguntarán si estoy haciendo apología a algo? Pues solo estoy resaltando características históricas del hombre, su mente, sus creencias y sus acciones, en un tiempo y en otro.
Pues un loco en la época de los vikingos quizás hasta era un héroe, en cambio en la actualidad es el más enfermo. Es resaltable que los vikingos eran crueles y asesinos, que no respetaban nada, eran la encarnación de la absoluta barbarie y la ignorancia, muy condenables en la actualidad, pero en su época eran aplaudidos por muchos, esa es la diferencia de dos épocas, no solo muy distantes, sino contrapuestas.
Un rey vikingo alimentaba las pasiones, el misticismo y los desenfrenos a diferencia de un psiquiatra que hace todo lo contrario, inhibe toda pasión, manifestación violenta y extremadamente religiosa. Uno libera la locura del hombre a la acción y el otro la reprime para hacerla desaparecer.
Los vikingos y los psiquiatras, interesante diferencia. En la época de los vikingos, un místico, una idea, o una acción se convertían en hecho y era creíble, no se cuestionaban mucho, porque eran paganos y muy crédulos en las señales y signos. Pues esos locos de la Alta Edad Media, en la actualidad están internados e inhibidos de toda pasión, medicados o maniatados, bajo tratamiento y observación. El vikingo era un guerrero que no miraba hacia atrás, dejaba toda su familia y vida, se unía a una tripulación y navegaban sin la certeza de un destino concreto, llegaban a otros pueblos y por su actitud bárbara saqueaban y tomaban todo, y hasta mataban para irse a otros pueblos y hacer lo mismo. Se terminaban asentando en algún lugar tomando la tierra y haciéndose señores de ella ¿Quién los frenaba, qué sentido tenían para comportarse así?
En cambio ya en el siglo XX y en el actual XXI, el hombre, el filósofo y el psiquiatra, se plantean cuestiones referidas al comportamiento humano y sus causas. Nuestro mundo es considerado civilizado al otro mundo de los vikingos como bárbaro e incivilizado. La razón es la ley, y todo debe someterse a ella. La ética, los buenos modales, y el buen comportamiento es lo debido, cualquier perturbación del orden en la persona es considerado una psicopatía, y cualquier perturbación en el orden público actos de delincuencia, todo ello condenable y puesto a examen, vigilancia y disciplina. Cualquier alegoría al misticismo sin una prueba y sin un evento examinable y que no se pueda explicar, ya es solo cosa de la persona y de su mente, y se debe poner a tratamiento médico para que no se manifiesten tales síntomas.
¿Con esta comparación me preguntarán si estoy haciendo apología a algo? Pues solo estoy resaltando características históricas del hombre, su mente, sus creencias y sus acciones, en un tiempo y en otro.
Pues un loco en la época de los vikingos quizás hasta era un héroe, en cambio en la actualidad es el más enfermo. Es resaltable que los vikingos eran crueles y asesinos, que no respetaban nada, eran la encarnación de la absoluta barbarie y la ignorancia, muy condenables en la actualidad, pero en su época eran aplaudidos por muchos, esa es la diferencia de dos épocas, no solo muy distantes, sino contrapuestas.
Un rey vikingo alimentaba las pasiones, el misticismo y los desenfrenos a diferencia de un psiquiatra que hace todo lo contrario, inhibe toda pasión, manifestación violenta y extremadamente religiosa. Uno libera la locura del hombre a la acción y el otro la reprime para hacerla desaparecer.
lunes, 7 de enero de 2013
Rotación del Mundo
He aquí el círculo vicioso de la Historia que se repite constantemente, entre el orden y el desorden, entre la libertad y la opresión. Estadistas, bárbaros, clérigos y los burgueses, son los personajes que entran dentro de toda esta contienda.
viernes, 4 de enero de 2013
Obsequios al Altísimo
Cristo Rey:
En la historia han habido tres grandes reyes hacedores de la Iglesia. Ellos son Carlomagno, Otón I del Sacro Imperio Romano Germánico y Ricardo I de Inglaterra Corazón de León.
Carlomagno fue quien le entregó la tierra a la Iglesia, los estados pontificios.
Otón I quien la refinó en doctrina, estructura y en su papel en el mundo, o sea quien la pulió.
Y Ricardo Corazón de León quien le entregó el cetro del reino del mundo, y se hizo su servidor.
¿Recuerdan a los tres reyes magos? Creo que inducen a estos hechos, pues cada rey le entrega un regalo al Mesías recién nacido, en este caso de los reyes anteriormente nombrados, en vez de “mirra, incienso y oro”, “la tierra, el ornamento y el cetro”, porque estos reyes han conseguido victorias para Dios a diferencia de otros reyes del mundo y de la historia.
Cristo no bajó al mundo físicamente en la edad media para recibir todos estos obsequios, por lo que sus representantes el Papa, fueron los que se encargaron de animar en el Evangelio al mundo, a ocupar ese lugar vacante por el Mesías.
Pero Dios no ignoró todo esto, y en un momento llama a uno de estos reyes, a Ricardo, en otro momento e instante, en donde le pide preparar al mundo para su Venida, para que dé su ejemplo de renuncia al mundo y de regalar su corona a Dios, él debe llevar a todo el mundo a seguir ese mismo ejemplo para esperar y prepararse para recibir a su Salvador y Rey.
Así Ricardo en Juan el Bautista, prepara el camino, 'renuncien al mundo, sométanse a la Voluntad del Altísimo', y un condimento nuevo, "Arrepiéntanse de sus males". Así el mundo cede sus privilegios para Dios. También llama a los demás reyes a un nuevo compromiso, y los pone a trabajar para un verdadero cambio.
Pero cuando viene Cristo le da otro sentido a todo esto, y lo muestra con el amor, no se renuncia simplemente por entregarle un poder a Dios, sino por hacerle un obsequio afectuoso, alabarlo, adorarlo, bendecirlo, amarlo, anhelarlo, quererlo, glorificarlo. Y Cristo también responde con regalos, porque los obsequios son del pueblo para Dios y de Dios para el pueblo, nace una relación entre el Hombre y Dios. Así desde Cristo se tiene una visión que se aparta de la del mundo, es un verdadero giro copernicano, se aparta radicalmente de la visión mundana de las cosas. Ya no se trata de si el poder o no el poder, si soy rico o si soy pobre, ahora se trata de amar, y en el amor se contradicen todos los valores que el mundo venía conociendo tanto en un extremo como en el otro. Si existe una antítesis de un mundo ambicioso, no hay más real que Cristo.
En la historia han habido tres grandes reyes hacedores de la Iglesia. Ellos son Carlomagno, Otón I del Sacro Imperio Romano Germánico y Ricardo I de Inglaterra Corazón de León.
Carlomagno fue quien le entregó la tierra a la Iglesia, los estados pontificios.
Otón I quien la refinó en doctrina, estructura y en su papel en el mundo, o sea quien la pulió.
Y Ricardo Corazón de León quien le entregó el cetro del reino del mundo, y se hizo su servidor.
¿Recuerdan a los tres reyes magos? Creo que inducen a estos hechos, pues cada rey le entrega un regalo al Mesías recién nacido, en este caso de los reyes anteriormente nombrados, en vez de “mirra, incienso y oro”, “la tierra, el ornamento y el cetro”, porque estos reyes han conseguido victorias para Dios a diferencia de otros reyes del mundo y de la historia.
Cristo no bajó al mundo físicamente en la edad media para recibir todos estos obsequios, por lo que sus representantes el Papa, fueron los que se encargaron de animar en el Evangelio al mundo, a ocupar ese lugar vacante por el Mesías.
Pero Dios no ignoró todo esto, y en un momento llama a uno de estos reyes, a Ricardo, en otro momento e instante, en donde le pide preparar al mundo para su Venida, para que dé su ejemplo de renuncia al mundo y de regalar su corona a Dios, él debe llevar a todo el mundo a seguir ese mismo ejemplo para esperar y prepararse para recibir a su Salvador y Rey.
Así Ricardo en Juan el Bautista, prepara el camino, 'renuncien al mundo, sométanse a la Voluntad del Altísimo', y un condimento nuevo, "Arrepiéntanse de sus males". Así el mundo cede sus privilegios para Dios. También llama a los demás reyes a un nuevo compromiso, y los pone a trabajar para un verdadero cambio.
Pero cuando viene Cristo le da otro sentido a todo esto, y lo muestra con el amor, no se renuncia simplemente por entregarle un poder a Dios, sino por hacerle un obsequio afectuoso, alabarlo, adorarlo, bendecirlo, amarlo, anhelarlo, quererlo, glorificarlo. Y Cristo también responde con regalos, porque los obsequios son del pueblo para Dios y de Dios para el pueblo, nace una relación entre el Hombre y Dios. Así desde Cristo se tiene una visión que se aparta de la del mundo, es un verdadero giro copernicano, se aparta radicalmente de la visión mundana de las cosas. Ya no se trata de si el poder o no el poder, si soy rico o si soy pobre, ahora se trata de amar, y en el amor se contradicen todos los valores que el mundo venía conociendo tanto en un extremo como en el otro. Si existe una antítesis de un mundo ambicioso, no hay más real que Cristo.
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